Romance a la gitana dormida
La gitana está dormida
quién sabe en qué pensará,
tal vez, en amores idos
o en alguno que vendrá.
La blanca y redonda luna
con paciencia observa ya
de que plácida manera
la gitana en Mayenne, Laval,
se echó a descansar un rato,
con su bastón, y al pensar,
allí se quedó dormida,
allí se dejó llevar...
Su mandolina la espera,
echada en su mismo andar,
y un viejo cántaro fresco
también a su lado está.
Un león aguarda paciente,
no interrumpe el dormitar
más bien vela por sus sueños
no se vayan a escapar.
La gitana está dormida;
en un gran desierto está,
pues... quizás vaga por ellos,
y de ellos se ha de alejar.
La gitana está dormida;
cuando despierte... ¿què hará?
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